Antiespecismo

Para hablar del especismo, tenemos que explicar primero qué es el antropocentrismo, ya que ahí encuentra sus raíces y justificación.

El antropocentrismo es un concepto filosófico o idea que considera al ser humano como centro de todas las cosas y fin absoluto de la naturaleza.

El antropocentrismo ha sido una idea dominante desde la formación de las primeras civilizaciones. Es un pensamiento que surge con más fuerza a partir del Renacimiento y como evolución del monoteísmo, heredado de la religión cristiana (Entonces dijo Dios: «Hagamos al hombre a nuestra imagen, conforme a nuestra semajanza; y señoree en los peces del mar, en las aves de los cielos, en las bestias, en toda la tierra, y en todo animal que se arrastra sobre la tierra». Génesis, Cápitulo 1, vérsiculo 1.26).
A partir de la época Renacentista, el ser humano se convierte en la medida de todas las cosas y los demás seres vivos son sólo meros objetos de consumo, experimentación y análisis científico.

El término especismo se refiere a la discriminación de los animales por la especie a la que pertenecen. Cuando ponemos nuestros intereses por delante de los demás animales estamos siendo especistas, igual que cuando ponemos los intereses de una especie animal no humana por delante de otra, como por ejemplo, dando prioridad a los intereses de los perros frente a los de las vacas o los cerdos. Es lo mismo que luchar para liberar a animales no humanos y contribuir o no querer abolir la esclavización animal humana, también es ser especista. El especismo establece un orden jerárquico de una especie sobre otra.
Una sociedad antiespecista debe perseguir abolir el sometimiento y opresión de cualquier animal, humano o no humano.

Los animales podemos sufrir y disfrutar, por ello, tenemos intereses y necesidades propios, con independencia de nuestra especie. Debemos respetar a TODOS los animales no humanos, todos son individuos sintientes que quieren vivir, y nosotros debemos respetarles. No importa si pueden razonar o no, si pueden usar palabras para comunicarse o no, la clave es ¿pueden sentir?

Para la abolición del especismo lo primero que debemos hacer es llevar una estilo de vida vegano, libre del uso de animales como recursos.

Cada segundo, miles de animales no humanos son asesinados sistemáticamente a causa del especismo, para comerlos, entretenernos, en experimentos, para vestirnos, para exhibirlos en zoos…Si reflexionamos acerca de la relación que tenemos los animales humanos con el resto de animales, nos daremos cuenta de que es una relación de dominación sistemática, cotidiana y socialmente aceptable. La gran mayoría de humanos ve al resto de animales como meros recursos a nuestra disposición.

Desde niños hemos sido educados haciéndonos creer que los intereses de los demás animales no tienen valor. La falta de reflexión sobre nuestras costumbres y hábitos cotidianos hacen que asumamos que los demás animales están para nuestro uso, sin cuestionarnos si esto es justo. Hemos asumido que los intereses, la vida y la libertad de los animales que no pertenecen a nuestra especie son menos valiosos que los nuestros.

La explotación animal está tan arraigada en nuestra mentalidad, que no nos planteamos que al hacerlo estamos cometiendo una terrible injusticia, provocando dolor y sufrimiento inimaginables, así como, millones de asesinatos.

¿ por qué respetar a los animales?

Todos sentimos y nuestras vidas son importantes para nosotros. Cada animal, cada individuo, quiere vivir como nosotros, y no debemos ser quienes den valor a sus vidas, para el ratón, el cerdo, la vaca, la rana o la abeja su vida es tan importante para ellos como para nosotros la nuestra. Ellos también quieren disfrutar de su vida y de su libertad sin ser objetos de agresión ni dominación.

Los criterios del especismo son los mismos que los del racismo y el sexismo. El racismo discrimina en base a la raza, y el sexismo en base al sexo, poniendo los intereses de una raza o un sexo por encima de los de otra raza y sexo, unos son tan injustos como los otros.

Toda forma de discriminación y explotación debe ser abolida. Debemos dejar de considerarlos medios para nuestros fines y actuar coherentemente de acuerdo con unos principios éticos de justicia e igualdad.

¿ cómo dejar de ser especistas?

– Hazte vegano: Los animales no somos comida. Todos los productos de origen animal suponen sufrimiento y muerte, la carne, el pescado, la leche, los huevos, la miel y sus derivados.
El hecho de que muchos seres humanos consumidores de carne utilicen como argumento la necesidad del hombre de ingerir este producto de origen animal, hoy en día resulta vacío y fácilmente rebatible. Hace años, durante la existencia de los primeros humanos, el consumo de carne se debía únicamente a la necesidad de supervivencia, y por ende, perpetuación de la especie, actualmente disponemos de muchos otros recursos que pueden suplir perfectamente nuestras necesidades alimentarias, como por ejemplo las proteínas de origen vegetal, y de este modo no tener que sacrificar la vida de otros seres vivos que cohabitan con nosotros en la naturaleza.

– No utilices ni piel, ni pelo, ni cuero, ni lana, ni seda: Los animales no somos vestimenta. Los animales necesitan su piel para vivir, y tanto la piel, como el pelo, la lana, el cuero y la seda, suponen sufrimiento y muerte para los animales no humanos.

– Oponte a la experimentación con animales: Los animales no somos material de laboratorio, rechaza ésta práctica y usa productos no testados en animales, ni procedentes de su explotación.

– Rechaza los espectáculos que utilizan animales: Los animales no somos objetos de entretenimiento. Los zoos, acuarios, circos, corridas de toros, caza, pesca provocan privación de libertad, sufrimiento y muerte.

– No compres animales: Los animales no somos objeto de consumo para hacer compañía ni para satisfacer las necesidades afectivas de nadie. Si quieres rescatar un animal adóptalo y trátale con respeto dándole todo lo que necesita, no son juguetes ni esclavos, sino nuestros compañerxs, en igualdad de condiciones, en esta vida.

El veganismo implica un estilo de vida coherente y comprometido con la ética antiespecista. Más allá del vegetarianismo, el veganismo prescinde de la utilización de animales y productos derivados de su explotación en todos los ámbitos de nuestra vida.

Algunos textos han sido extraídos de: Leon vegano, Acabemos con el especismo.